2.6. Otros intercesores contra la langosta. Los santos especialistas contra la langosta fueron sobre todo teólogos
[1],
como San Agustín que tuvo especial influencia contra dichos insectos en la España
medieval y del Antiguo Régimen. El origen del culto al obispo de Hipona como
protector de las plagas de langosta parece estar relacionado con una plaga
sufrida por Toledo en 1268, cuando el Santo con su báculo arrojó a la langosta
al Tajo.([1])
También en Jaén hay constancia de esta devoción. Como las misas que se
mandaron oficiar en 1598 en el Convento de San Agustín.([1])
En 1633, con motivo de una plaga, se oficiaron varias misas de
rogativa, con exposición del Santísimo. En esa misma ocasión se hicieron
peticiones de intersección a santa Catalina, muy vinculada a la Ciudad, y a
otro santo de raíz labradora, san Isidro, cuyo culto se extendió con especial
fuerza en dicho siglo.([1]) Las advocaciones con especial relevancia en las ciudades y pueblos eran
también objeto de rogativas y oraciones, no sólo con motivo de la existencia
de plagas, sino a causa de epidemias y alteraciones climatológicas, y sin
contar con una función taumatúrgica precisa, su sólida presencia y fama las
convertía en el recurso supremo cuando la situación adquiría especial
gravedad. Indudablemente las dos devociones de mayor difusión en Jaén serán
Nuestro Padre Jesús y la Virgen de la Capilla.
Es notoria la fe del pueblo de Jaén hacia Nuestro Padre Jesús,
arraigada en el pasado y demostrada en las más diversas vicisitudes. Hablemos
de la langosta: en mayo de 1708 se organizó una solemne procesión, con la
participación de las principales instituciones y estamentos de la Ciudad.([1]) También deben mencionarse las procesiones en honor de la Virgen de la
Capilla, como la celebrada en 1633 ([1])y
las organizadas en 1670 ([1])y
1671, en vísperas del día de san Gregorio. ([1]) En Úbeda las rogativas fueron dedicadas a la Virgen de Guadalupe, como
ocurrió en 1670 y 1672 y al Cristo de la Caída en 1757.([1]) Hubo actos dedicados a la Virgen del Carmen, con motivo de distintas
plagas de langosta. En 1707 en Torredonjimeno ([1])y
en 1756 y 1757 en Jaén.([1]) En 1708 acordó el Deán y Cabildo de la Catedral que el tres de mayo,
jueves por la mañana “se coloque a Nuestra Señora de la Antigua en el Altar
Mayor” para oficiar determinados oficios religiosos.([1])
También san Marcos fue objeto de muchos votos y actos piadosos con
motivo de las plagas de langosta, así en 1449 en Baeza, se hacía procesión,
misa y sermón, además de ofrecer un toro a los pobres, todo en honor del
Santo. ([1])En
Bedmar se votó en la festividad de san Marcos comer una vez al día, no montar
a caballo, encender lumbres, no dar de comer a las bestias, amamantar a los niños
de pecho hasta después de la Misa Mayor. No se podían comer ni leche ni
huevos. Los votos vinculaban no sólo a los vecinos y residentes, sino también
a los transeúntes.([1])
Otros votos dedicados a san Marcos, motivados por la plaga de langosta se
hicieron en Chiclana de Segura, Sorihuela, Albanchez y Jimena.([1])
Citaremos por último las procesiones dedicadas a san Nicasio en 1670.([1])
[1] Christian, Op. Cit, pág. 62. [2] Vázquéz Lesmes,
Santiago Álvarez. Op. Cit. pág. 132. [3]
A.M.J. Act. 1598. Cab.
11-4. [4] López Cordero, Aponte
Marín. Op. Cit. pág. 106. [5]
Ibidem. pág. 107. [6]
Ibidem [7]
A.M.J. Act. 1670. Cab. 26-4. [8]
A.H.D.J. Act. 671. Cab, 7-7. [10] Cañada Hornos. Op. Cit.
págs. 40. [11] Escalona Cobo, L.,
Biografía de la Real y Muy Ilustre Cofradía del Carmen@ en Actas de la II Asamblea de Estudios Marianos. Córdoba, 1987, pág.
105. [12] A.H,D.J. Act. 1708. Cab..
2-5. [13] Ximena Jurado. Op. Cit.
pág. 402. [14] Troyano Biedma, J.M. Bedmar.
Jaén, 1985 [15] Pérez Ortega, M.U. Campanas...
T.II. págs. 631,
647 ss. [16]
A.M.J. Act. 1670. Cab. 29-4. |