Soy sonámbula sombra

Escapando en silencio;

Ya la luz no penetra

Mis poros macerados;

Quedó estática mi alma

Sin el sonido suave

De tu voz hecha brisa,

De tu voz hecha viento.

Soy la roca desnuda

Que ha quedado en la playa

Y el viento enfurecido

Le rasga la epidermis;

Las algas somnolientas

Amarran la cintura,

Como queriendo asirla

A esta tierra caliente.

Soy la sombra escondida

Que solloza en la noche

Y busca una ventana

Para escapar del mundo.

Dejar al hombre-fiera

Que se pudra en el fango

Y que con creces pague

El daño que ha causado.

Soy la sombra silente

Contando las estrellas,

Para buscar entre ellas

La más bella y brillante

Y sabré al encontrarla

Que eres tú, amado hijo,

Quien desde ese alto cielo

Me envías tu consuelo.

De “Más allá del dolor,

Más allá del amor”

                              *Marina de la Cueva

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